Con profundo pesar, despedimos a Miguel Uribe Turbay, quien supo unir la fe, la política y el servicio social con un corazón dispuesto a luchar por la libertad y la dignidad de todos. Aunque la violencia apagó su voz, su ejemplo sigue hablando de un liderazgo que nunca olvidó la importancia de la familia, la fe y la esperanza en Cristo.
