La Restitución
Nos abocaremos ahora a una enseñanza especial que bendecirá enormemente a los que presten oído.
Esta llave se llama restitución.
28 ―¿Qué de nosotros, que lo hemos dejado todo y te hemos seguido? —comenzó a reclamarle Pedro.
29 ―Les aseguro —respondió Jesús— que todo el que por mi causa y la del evangelio haya dejado casa, hermanos, hermanas, madre, padre, hijos o terrenos 30 recibirá cien veces más ahora en este tiempo (casas, hermanos, hermanas, madres, hijos y terrenos, aunque con persecuciones); y en la edad venidera, la vida eterna. 31 Pero muchos de los primeros serán últimos, y los últimos, primeros. Marcos 10:28,31 NVI
Hago, por ejemplo, una distinción radical de tres conceptos: Leyes, armas y llaves.
- Leyes son exigencias para cumplir.
- Armas son habilidades para desarrollar.
- Llaves son elementos para abrir y cerrar.
Las Llaves del Reino no tiene más pretensiones que las que nacen de un corazón sincero que procura ser dócil a la guía del Espíritu Santo, y una mente alerta sobre las Sagradas Escrituras para oír lo más claramente posible la voz siempre actual de Jesucristo.